Sentimientos Cautivos

Sentimientos Cautivos

-Es un cuarto grande.

Diría que son grises pero, las paredes, más que grises, no poseen color, y tampoco sé si en verdad existen. Solo sé que son seis paredes que forman ángulos de noventa grados en los vértices y las que son paralelas están muy alejadas una de la otra. Una enfrente; otra atrás, arriba mi favorita, una más abajo; otra a la derecha y finalmente una a la izquierda.

No hay ninguna ventana en las paredes, ningún tragaluz arriba, ni ningún agujero abajo. No tengo idea de cómo llegué ni de cómo me iré.

No hay ninguna iluminación, ninguna luz. Sin embargo puedo ver perfectamente todo, aunque no se si lo que veo es real, creo que si…

Cada vez que un pensamiento se filtra de alguna manera dentro de este lugar, le pido que me lleve con él, que me saque para poder volar allá afuera, pero este solo me observa, repentinamente los muros se convierten en limpias superficies reflejantes, en donde mi imagen se multiplica sin límites y crece, se deforma y comienza a asustarme, entonces el pensamiento termina sus observaciones y se esfuma.

Hay ciertas veces en las que una idea se acerca y me mira desde más allá de las paredes, me mira fijamente y las paredes por unos momentos se desvanecen, entonces me exalto y, vibrante trato de volar hacia todos lados, llegar muy lejos y conquistarlo todo, es entonces cuando las paredes reaparecen y la idea se aleja, con la nueva forma de mala idea.

Me gusta mucho estar aquí. Es calido a veces, y otras es fresco, pero nunca se pone muy caliente o muy frío. Aún siento muy cerca esos momentos en los que yo era quien calentaba o enfriaba todo, pero normalmente se me salía de control y todo se ponía muy calientito como en la playa, y en algunas otras parecía nevar…

No hay mucho aquí dentro, o mejor dicho no hay nada. Pero me tengo a mi mismo, y no me falta nada. Pues aun puedo ver lo que pasa con mi amo, no puedo ayudarlo, pero siempre estoy al pendiente de él.

Mi amo es un hombre sabio, y amoroso. Él solía tomar decisiones correctas y completas. Yo era su concejero junto con Nózar. Siempre, aunque había altibajos, le éramos fieles y le ayudábamos en todo lo que tuviéramos a la mano, aunque el amo siempre me oía mas a mí que a Nózar, y Nózar decía que obteníamos mejores resultados cuando yo aconsejaba que cuando él lo hacía.

Sin embargo, tuve un momento en el que comencé a tambalearme, y una parte de mi se posesionó completamente de mí y no pude aconsejar correctamente. En ese momento Nózar, resuelto de lo que me sucedía, se embriagó de poder y engañó al amo…

Al siguiente momento me encontré aprisionado en este hermoso lugar. Donde Nózar envía pensamientos e ideas para que me observen. Sin embargo no me inmuto por esto pues sé que mi amo es quien le pide hacer eso.

En pasados momentos he presenciado como el amo viene a visitar las inmediaciones de la pequeña caja de cristal en la que me encuentro, y por medio de Nózar, recuerda cuando yo lo aconsejaba también. Y hay algo que no entendía, pues yo estoy aquí, pero ellos parecen haberse olvidado de mi existencia, y solo me recuerdan con calidez.

Hace muchos momentos que mi amo descubrió la traición de Nózar, sin embargo no puede destituirlo, pues si el se va, no le quedara nadie que lo ayude, y temo que algo muy malo le suceda.

No temería que algo malo le pasara si no fuese porque, hace ya algunos momentos que descubrí al mismo tiempo que mi amo, el terrible hecho de que Nózar puede estar enfermo e incluso muriendo.

Mi amo, en un sabio acto, comenzó a rezar a Dios para encontrarme una vez mas, pues conciente es de que en ausencia de Nózar, lo único que podrá hacer será actuar en base a su conocimiento empírico, sus recuerdos, su sabiduría…

Escasos momentos atrás, el amo acudió por aquí siguiendo a una idea, y halló esta estancia de cristal, sin embargo necesitaba seguir a un pensamiento para entrar.

En los últimos momentos me preocupa el hecho de que Nózar no ha mejorado y el amo comienza a tratar de actuar por si mismo, pero sus decisiones son muy influenciadas por sus experiencias y se encuentra confundido y desorientado, sus acciones cambian de un segundo a otro, sus actos ponen en riesgo su completa integridad, y tengo por seguro que si no se hace algo, él colapsará.

Desde que perdió el parcial control sobre él mismo, mi amo ha tratado de calentar un poco todo, pero no puede, porque Nózar está indispuesto y yo estoy aquí dentro, yo podría darle mucho de ese calido sentimiento, si solo pudiese…

Afortunadamente para todos nosotros y los otros que se esconden en algún lugar o yacen allá afuera dependiendo en parte de mi amo, él ha encontrado la forma de comunicarse conmigo y justo en este momento hemos establecido de nuevo nuestra antigua alianza.

-Amo, ¿Por qué me encerraste aquí?

-No he sido yo, has sido tú mismo. O ¿Debo decir ustedes?

-Amo estoy dispuesto a ayudarte en lo que necesites. Solo ordena.

-Quiero que me ayudes a calentar este lugar, fuera de aquí y a mi mismo.

-Lo haré amo, pero antes debes derribar estos muros que no me dejan volar.

-No necesitas volar para calentar.

-Si lo necesito, pues del vuelo es de donde encuentro el calor.

-Repararemos en cómo lograrlo, y después necesito que me ayudes a curar al envilecido Nózar.

-Si amo.

-Romperé las paredes, pero durará muy poco tiempo, si no estas dentro de ellas o consigues mucho calor, para antes de que estas vuelvan a edificarse, puedes morir.

-Tendré que hacer muchos viajes amo, pues es mucho calor el que me pides.

-No importa cuantos, solo asegúrate de hacerlo lo mas rápido que puedas.

-Amo…

-¿Qué pasa?

-No estoy seguro de que pueda conseguir tanto calor como quieres, quizás si tanto como necesites para seguir, pero no tanto como quieres.

-Si no conseguimos suficiente calor, el alma morirá, y eso sería fatal. Por eso lo intentarás mientras yo busco la llave para disolver esta prisión.

-Si amo.

En este momento busco calor en cualquier parte, aunque debo volver a habitar dentro de aquellas paredes constantemente: cada dos momentos, así que no puedo conseguir mucho calor, y el poco que consigo, se enfría durante mi estancia entre aquellas paredes. Ojala encontrase una potencial fuente de calor abundante y rápido, pues durante mi ausencia, Nózar sigue muy enfermo, y modifica las decisiones correctas de mi amo. Cualquier cosa podría suceder…