Cruentas consecuencias del Principio Positivo y el poseer un subconsciente curioso…

Cruentas consecuencias del Principio Positivo y el poseer un subconsciente curioso…

Me estalló la pequeña bomba de tiempo que llevaba siempre a todas partes conmigo. Este día durante el tiempo de calma, una sorpresa llegó provocando el desbordamiento de mi burbuja amniótica de presiones y miedos…
Ahora sé que yo no soy lo suficiente para mi mismo ni para los que me rodean… Debo recordar siempre este día como el día en que aprendí que no aprenderé lo que quieren que aprenda…

Mi vida se había tornado solitaria y sin sentido después del grandísimo incidente hace un año, pero comenzaba a readaptarme a lo que mi vida parecía ser… De unos meses hacia acá, una persona importante, convenció a mi subconsciente de que “El resultado en todo es directamente proporcional al esfuerzo que en esto empeñes. Pero nada se logra si no se cree que se logrará.” (Principio Positivo) Y mi subconsciente lo fue aceptando lentamente, provocando que, sin darme cuenta, comenzara a poner todas mis fuerzas en hacer todo lo posible por mejorar en todo… Después de unos días me fui apegando a la idea y a creer que enserio se podía lograr mejorar por ese común y corriente método de positivismo, y comencé a ver resultados realmente impresionantes…

Desde hacia un tiempo antes, yo tenia aprobado con honores y menciones honoríficas un simple método para mejorar que consistía en algo que difiere bastante del nuevo método (Principio Negativo). “Jamás hagas lo mejor que puedes, pues si no logras lo buscado caerás en una depresión momentánea; Nunca des lo mejor de ti, pues este mundo es traicionero y cuando le des la mano te agarrará la pata; Por ningún motivo esperes que algo saldrá bien, pues pensando esto no mejorará, y si no sale como esperaste tendrás una decepción mayor. Para realmente mejorar debes tener cuidado con lo que tratas para aprendes que es lo que realmente puedes hacer y no esperar obtener nada bueno, para que si se obtiene algo malo: se este preparado; y si se obtiene algo bueno: sentir una gran satisfacción.”
Era un principio algo largo, pero le aseguro a cualquier persona en el mundo que es un ciento por ciento efectivo.

Siempre tuve ejemplos de personas optimistas que usan el Principio Positivo para lograr algo grande en la vida, ya sean negocios o solo ser felices y pensé siempre que cabía la posibilidad de llegar a los mismos resultados que con el Principio Negativo. Así que sin algo que perder lo intenté.

Después de obtener los primeros resultados me sentí extasiado con el abundante éxito que obtuve con esto, sin embargo los resultados no eran balanceados, es decir que en algunas cosas había obtenido muy buenos resultados y en otras malos. Con optimismo decidí pensar que era por falta de costumbre usando este nuevo método, y seguí tratando hasta obtener los siguientes resultados esperanzadores, los cuales me mostraron que había logrado un balance mayor, aunque no perfecto, sin embargo los resultados anteriormente altos, habían reducido su éxito… Tratando de balancear un poco más la balanza, decidí darle una tercera oportunidad al Principio Positivo. Los resultados fueron desastrosos pero fascinantes. Había estado tan seguro de que todo saldría bien que subestimé las posibilidades de que algo pudiera salir mal. Pero estaba indudablemente viviendo el Principio Positivo (con precauciones insuficientes influidas también por el Principio Positivo). En todo lo que estimé un resultado medio, obtuve resultados medios, pero en todo lo que busque con fuerza un resultado favorable, conseguí un decepcionante golpe de realidad.

Fui violentamente golpeado por lo que sucedía en verdad, y era tarde para poder cambiarlo. Mi error lo encontré desde el hecho de haber dejado a mi subconsciente ser penetrado por la idea de que quizá la vida era más fácil de lo que yo la pensaba o de que habría otras formas de conseguir lo que se quería…

Ahora todo lo que construí antes de intentar vivir el Principio Positivo se derrumbó por éste y me dejó como un simple e indefenso animal que ha perdido su caparazón o sus garras o su rapidez… Ahora se que la vida solo se vive de una manera y depende de quien se sea para esto, al igual que el tigre tiene grandes garras y filosos dientes y el camaleón cambia de color para protegerse o atacar: no pueden cambiar lugares para intentar vivir la vida del otro pensando que es mejor.

Mis pensamientos divagan todo el tiempo, mi concentración se esfumó, mis miedos aumentaron en cantidad y fuerza, mi tiempo ya no es mío, me encuentro al limite del colapso nervioso sin poder dormir o calmarme mientras veo como lentamente el Principio Positivo sigue destrozando mi existencia y ahogándome en mis lagrimas de inmundicia, aún cuando trato de volver a ser quien usaba el Principio Negativo.

Es muy tarde ahora… Solo queda ver que sucederá después.