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Memoriasencadenadas

6 de octubre de 2009

A la orilla del cielo

Corto y equis... pero es algo... comenten.

A la orilla del cielo

Blanco.

–¿Aquí se acaba? ¿Es esto todo? –se preguntó el hombre de traje y maletín al vislumbrar a la orilla de la limpia e infinita tabla blanca en la que había caminado eternamente– no puede acabar aquí… es decir, no puede acabar. Debe ser infinito.

Se acercó a la orilla hasta asomar la cabeza hacia el vacío y debajo sólo vio blanco. Luego miró hacia atrás y vio su largo recorrido que se perdía por siempre en el espacio y el tiempo. Vio de nuevo el abismo, vacío hasta de oscuridad, y temió comenzar otro recorrido eterno: el de caer.

Era una orilla tremenda, larga como un hilo infinito de horizontes y blanco como sólo un paraíso limpio y perfecto puede ser. Toda una existencia comenzaba a desmoronarse ante esa línea que dividía el siempre conocido lugar y hogar del hombre y un vacío desconocido.

–No puede ser –soltó de pronto– siempre he estado caminando con el único propósito de encontrar que este cielo es infinito, pero no lo es… justo aquí se está acabando.

Que impotencia tan grande invadió el cielo entero en ese momento. Su voz se adelgazó y en su mente sus palabras comenzaron a titubear. Una línea que jamás debía encontrar le estaba limitando el infinito. Sintió nauseas, confusión, su vista se nubló. El gran espacio que el hombre siempre (o nunca) había conocido pareció reducirse tremendamente a una línea divisoria entre un sí y un no. Ahora tenía un cielo y un no cielo en el que podía caer indefinidamente.

–Si mi cielo no es infinito… Significa… ¿significa que tampoco yo lo soy?

Un desgarrador frío se apoderó de su alma y el maletín donde la llevaba. Sintió tristeza por primera vez. Sintió duda por primera vez. Sintió por primera vez. Y tal fue el sentimiento que una lágrima escapó de su ojo y comenzó a flotar hacia el vacío, pero no se sumergió en el no cielo, sino que cayó rápidamente hacia arriba. El hombre siguió su lágrima con la mirada y pudo vislumbrar, a lo lejos, el mundo.

Se inclinó sobre la orilla y se dejó caer hacia el mundo igual que la gota, pero su maletín, con su alma y su salvación cayó hacia abajo, hacia lo desconocido.

En la limpia e infinita orilla de la tabla del cielo sólo quedó el recuerdo taciturno del hombre, que cayó a la tierra sin saber dónde había dejado su alma y que estaría destinado por siempre a buscarla. Al final la orilla del cielo se desdibujó y bloqueó el paso entre el mundo de los vivos y el mundo de las almas.

3 Comentarios/Memorias:

sirnnenn dijo...

=O

Así es, me has dejado con la boca abierta, juro que es uno de mis favoritos, me encantó, todo, y sobre todo la temática (ahora entiendo el porqué de la conversación de ayer xD)

Aunque el final no me quedó tan claro y tuve que leerlo dos veces para entenderlo (no porque lo hayas redactado mal sino porque, yo, el distraído, no captó lo de la tierra arriba)

Cuando lo leí, borré de mi mente la imagen que tienes al inicio y coloqué algo parecido a lo que viene en el último capítulo de evangelion, la nada blanca (que supongo se apega más a tu texto) aunque la imagen actual también está bonita y estéticamente muy padre.

Lo mejor fue lo del maletín, una puntada que me encantó, al principio pensé que era sólo para ubicarnos con un personaje que es un hombre de negocios, pero luego descubrí que no, que realmente es algo mucho más profundo que un hombre con una HP en el maletín.

Eso de descubrir que el infinito no existe y que por lo tanto uno mismo no puede ser infinito es tan traumático como el texto mismo, me ha encantado.

Y el final ¡oh qué final! El hombre, en la tierra, destinado a buscar por el resto de la eternidad el alma que dejó atrás, cosa que se me hace algo injusta para el pobre hombre que sólo quizo seguir a una pobre lágrima, pero que me cautivó de tal manera que harás que me quede pensando en este texto por el resto de la noche.

Me gustó muchísmo, felicidads.ww

Soiral dijo...

sencillo, blah sabes que... me da flojera poner un buen comentario aqui.

Anónimo dijo...

Suena como a una clase de filosofia... pero es bueno xDD Me agrada